Islandia “la tierra de nieve”, un país de poco más de
330.000 habitantes llamó la atención del mundo futbolístico al participar por
primera vez a una Eurocopa, Francia 2016. Calló bocas a quienes le
llamaron “la cenicienta del torneo” eliminando a una grande como lo es
Inglaterra y llegando hasta cuartos de final. Si bien, Islandia estuvo en la
boca de todos los aficionados del fútbol, en el ámbito económico y financiero
pocos conocen que esta pequeña nación vivió una catástrofe de enormes
magnitudes luego del estallido de la crisis financiera de 2009 siendo el
colapso bancario más grande de la historia de la humanidad.
La historia
Pues bien, este cuento comienza en un lugar muy lejano
en el año 2000 cuando el gobierno de Islandia hizo una desregularización
bancaria, privatizando los tres bancos más grandes: Landsbanki, Kaupping y
Glitnir. Para 2003 los bancos comenzaron a expandirse hacia el extranjero, las
condiciones internacionales y la legislación europea permitió que fuese un
negocio atractivo mirar más allá de la isla.
En un periodo de cinco años, los tres pequeños bancos
islandeses que nunca habían operado fuera de Islandia pidieron prestado 120.000
millones de dólares, 10 veces la economía, es decir 1000% del PIB de Islandia
para aquel entonces, en contraste, Lehman Brothers representaba apenas el 5%
del PIB de Estados Unidos. Se creó una burbuja enorme, el valor de la bolsa
aumentó nueve veces.
Según los datos del Banco Central de
Islandia, justo antes de la bancarrota, los bancos tenían sus acciones en
coronas mientras que dos tercios de sus activos estaban en divisas extranjeras,
especialmente libras británicas. El motor de la crisis fue la corona islandesa.
Cuando el mercado no aporta las suficientes divisas, la capacidad de un Banco
Central para ayudar a los bancos es limitada. La banca islandesa tenía siete
veces el PIB del país en divisas extranjeras.
La crisis
Después de la quiebra de Lehman
Brothers en los Estados Unidos el 25 de septiembre, el banco Glitnir pidió 600
millones al Banco Central para pagar un préstamo que vencía en octubre. El
Gobierno le intervino el 29 de septiembre comprando un 75% de sus acciones por
600 millones. Sus títulos cayeron un 75%. Esto no devolvió la confianza
en el sistema financiero, los depósitos internacionales de sus bancos se
fugaban de Islandia y la Autoridad de Supervisión Financiera (FME) intervino el
6 de octubre para evitar la caída total de la banca nacionalizando también el
Landsbanki.
Cuando los bancos de Islandia se hundieron al final
del 2008, el desempleo se triplicó en seis meses, pasando del 3% al 9%, los
habitantes de Islandia se vieron afectados y muchos perdieron sus ahorros. La
autoridad supervisora financiera del gobierno no protegió a los ciudadanos, ya
que competir contra los abogados de los bancos era una tarea imposible, al
punto de que un tercio de los empleados de la institución reguladora fueron
empleados por los bancos.
Después de que los tres bancos más grandes de Islandia
quebraron en un lapso de tres días, y que la moneda se colapsó, el mercado
bursátil cayó 95% y casi todos los negocios en la isla estaban en bancarrota.
Las tasa de interés pasaron de un 14% a un 18%, los islandeses que tenían
préstamos, ya no podían pagarlos, tuvieron que vender sus activos y los
empresarios no pudieron invertir.
Para enfrentar las deudas exteriores de los bancos, el
Estado y los contribuyentes tenían que asumir la responsabilidad, al menos en
parte. Cada familia debía pagar 3.500 coronas durante 15 años al 5,5 % de
interés, los islandeses convocaron un referéndum para marzo de 2010 y el 93% de
los votantes dijeron “no” al pago de las deudas bancarias por el Estado
islandés. El gobierno renegoció el pago con nuevas condiciones, se rebajó la
tasa de interés al 3% y el periodo de pago sería de 37 años (hasta 2046) pero
con un segundo referéndum en 2011, los islandeses lo rechazaron.
Para resolver el problema, los 3 grandes bancos anunciaron su quiebra, en primer
instancia Landsbanki y su banco online fueron nacionalizados; mientras
que los otros dos fueron divididos en un «Nuevo Banco» y un «Viejo
Banco». El primero, con capitales nuevos, asumió actividades como
operaciones de pago, cajeros automáticos (ATM) permitiendo a la
población el acceso a sus ahorros, otorgamiento de créditos, entre otros. El
segundo, recibió las deudas y todos los negocios extranjeros con activos
tóxicos, cuya liquidación se concretó mediante un procedimiento de quiebra.
El banco Kaupthing hoy se llama Arion y el banco Glitinir ahora se llama
Islandsbanki. Los tres bancos, hoy parcialmente en manos extranjeras, ahora se
limitan a la realización de operaciones bancarias tradicionales dentro del
país.
Islandia hizo lo que pareciera que ningún otro país
desarrollado estuviera dispuesto a hacer: encarceló a un montón de banqueros.
La población impidió que los responsables de los malos manejos de los bancos
recibiesen, como en otros países, enormes sumas de dinero al dejar sus cargos. Una
comisión investigadora del Parlamento publicó un informe de 2.000 páginas que
señala a una treintena de dirigentes de bancos, miembros del gobierno y del
Banco Central como principales responsables de la debacle financiera. La Corte
Suprema juzgó a 4 de ellos condenándolos a penas de entre 5 y 6 años de cárcel.
La crisis no se extendió por mucho tiempo. La política enérgica, respaldada
por los habitantes arrojó resultados rápidamente. El turismo y la industria
pesquera se beneficiaron por la pérdida de valor de la corona, que cayó frente
al dólar estadounidense, desde las 50-80 ISK por dólar a las 110-115 ISK.
Importaron menos bienes de consumo caros pero aumentó la producción nacional.
Tres años después de la caída registrada en 2009, hubo un crecimiento de 3% más
que la media de la Unión Europea. En 2011 la inflación ya era de 3% y la tasa
de desempleo llegó a 5%, no había desempleo entre los jóvenes, a diferencia de
otros países. También ayudó la decisión tomada en 2013 por el Tribunal de la
Asociación Europea de Libre Comercio que rechazada la responsabilidad del
Estado en las deudas bancarias extranjeras. El descenso de la corona islandesa
fue la condición previa decisiva para el rápido restablecimiento. Después de la
crisis, la corona islandesa se ha estabilizado en alrededor de un 30% por
debajo de su valor anterior a la crisis.
El
escenario post crisis:
El último dato arrojado sobre el ratio deuda/PIB fue de 68,5% disminuyendo
desde el tope de 95,1% alcanzado luego del estallido de la crisis, el par
USD/ISK está en 113,21, bastante lejos de los 67 antes de la crisis. La tasa de
desempleo llegó a 2,9% para finales del 2016. El nivel de inflación fue de
1,9%, incluso es menor que antes de la crisis. La tasa anual de crecimiento del
PIB para finales de 2016 fue de 10,2% alcanzando niveles cercanos al rápido
crecimiento pre crisis.
El
despertar futbolístico
La sorpresa islandesa partiría de la ronda clasificatoria a la Eurocopa de
Francia 2016, jugando 10 partidos, un grupo complicado con selecciones como
Países Bajos, Turquía y República Checa. El conjunto islandés marcaron 17
goles, ganando 6 partidos, 2 empates y 2 derrotas, con un promedio de 1,7 goles
por partidos y tan solo 0,6 recibidos.
Islandia fue una de las razones por las cuales Holanda quedó fuera de la Eurocopa,
y por primera vez en su historia llegaba para competir en un campeonato
Europeo, puesto que, al mirar al pasado la selección islandesa jamás había
participado en un torneo grande y como se dice comúnmente en el fútbol siempre
fue una “cenicienta” un equipo con el que los grandes daban por sentado su
victoria tanto fuera o en casa.
Islandia se convertiría en el país
menos poblado en una fase final (tiene más volcanes que futbolistas
profesionales), el 8% de la población se desplazó para apoyar a su selección en
Francia (Del Río, 2016).
Daría el primer golpe en la Eurocopa
al enfrentarse a la Portugal de Cristiano Ronaldo logrando un empate y
mostrándose como un rival complicado, con una defensa férrea y un ataque
eficaz. Logró dos empates y una victoria quedando en segundo lugar por detrás
de Hungría (que también fue sorpresa).
En cuartos de final ocurrirá algo histórico, la
selección islandesa se enfrentó a Inglaterra y consiguió una victoria agónica
2-1, la prensa inglesa lo catalogo de haber sido "Humillados
por un equipo dirigido por un dentista".
En octavos de final, y luego de hacerse viral por los cánticos y
celebraciones “vikingas” la historia no sería tan agradable, el 98% de los
hogares islandeses sintonizaron una dolorosa derrota contra el local, la
selección Francesa golearon 5-2 a los aguerridos islandeses, quienes de hecho
luego de sufrir los primeros goles perdieron la concentración pero no bajaron
los brazos hasta el final.
Hoy, Islandia no solo se encuentra en la posición 20 en el ranking FIFA, es
una nación que se ha levantado de las cenizas luego de la más desastrosa crisis
económicas de su historia, la pequeña tierra de nieve, hogar de paisajes
hermosos es sin duda alguna un ejemplo para el mundo.
Referencias:
Del Río, J. (2016). 7 curiosidades de Islandia que quizás no conozcas.
Recuperado de: http://www.marca.com/futbol/eurocopa/2016/06/28/57726e99ca4741a95c8b460b.html
González, J. (2012). Islandia, la crisis de un país menos poblado que Las
Palmas. Recuperado de: http://www.elmundo.es/elmundo/2012/04/23/economia/1335196633.html
Wuthrich, W. (2015). La vía islandesa ante la crisis financiera. Recuperado
de:
Otros links:
PD: Agradecimientos a Maria Garcia por parte del contenido.
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